Las bendiciones que Dios nos concede a través de la oración nos ayuda a tener un mayor sentido de apreciación por todas las grandiosas bendiciones que ya nos rodean. También nos ayuda a abrir nuestros corazones y mentes para aquellas bendiciones que vendrán a nuestras vidas.
El punto está en el enfoque que muchos tenemos, al solamente detenernos en aquello que nos falta, en vez de apreciar de lo que ya tenemos. Buscar la ayuda divina a través de la oración expande nuestra visión y nos permite ver con más claridad, la multitud de bendiciones que a menudo ignoramos.
Por consiguiente, vendrá un profundo agradecimiento y apreciación por lo que ya tenemos, permitiéndonos abrirnos a recibir y agradecer la mano poderosa y misericordiosa de nuestro Dios. Que nos sostiene en cada detalle de nuestra vida. Haciéndose más visible cada día a lo largo de nuestro camino, la senda de vida eterna."
Salmos 100
"1 Cantad alegres a Dios, habitantes de toda la tierra.
2 Servid a Jehová con alegría;
Venid ante su presencia con regocijo.
3 Reconoced que Jehová es Dios;
El nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos;
Pueblo suyo somos, y ovejas de su prado.
4 Entrad por sus puertas con acción de gracias,
Por sus atrios con alabanza;
Alabadle, bendecid su nombre.
5 Porque Jehová es bueno; para siempre es su misericordia,
Y su verdad por todas las generaciones."
